Lo que sigue a continuación es una parte del artículo titulado "La piedra natural en Castilla y León" de José Ignacio García de los Ríos Cobo, Geólogo de SIEMCALSA (Valladolid) y publicado en la revista ROC MAQUINA del mes de marzo de 2005.
5. Granitos
Bajo este nombre se incluyen los granitos y otras rocas intrusivas, de origen ígneo, constituidas fundamentalmente por cristales de cuarzo, feldespatos y micas en distintas proporciones, que contribuyen a su clasificación y que le confieren una textura granuda. Suelen ser muy homogéneos, de gran dureza y resistencia a las alteraciones. Se utilizan como piedras de cantería o como tableros serrados de grandes bloques.
Se han empleado en la construcción y talla desde muy antiguo, como atestiguan los castros célticos de la zona noroccidental o los verracos y toros abulenses.
En nuestra Comunidad son de procedencia antigua (340-275 millones de años) y están ampliamente representados (aproximadamente un 30% de los afloramientos graníticos de todo el país). Esta abundancia no se corresponde con la escasez de variedades definidas comercialmente, ni con la presencia de canteras activas. En la actualidad se explotan sólo las variedades muy semejantes entre sí, que veremos seguidamente, aunque gracias a continuas investigaciones se podrá ampliar esta relación.
El Gris Avila se extrae, en forma de grandes bloques, en una cantera ubicada en Martínez (Avila). Es un granito biotítico (±moscovita), de grano fino-medio, equigranular, bastante homogéneo, de color gris claro, que se corta muy recto (gracias a su orientación sub-vertical y a una cierta microfracturación mineral horizontal).
El Azul Noche es un monzogranito biotítico, de grano grueso, porfídico, de color gris oscuro ligeramente azulado. Su origen es una cantera en Junciana (Ávila), de donde se cortan bloques de gran tamaño, con una gran producción. El Gris Villa se obtiene, en grandes bloques, en Villacastín (Segovia). Se trata de una granodiorita de grano medio, de color gris, prácticamente equigranular.
El Silvestre Dorado y el Gris Duero se obtienen en una cantera de Fornillos de Fermoselle (Zamora). Se trata de grandes bloques de un leucogranito de dos micas de grano fino y tonos crema-gris muy pálido. El similar Silvestre Sayago o Gris Duero, de grano algo más grueso, se extrae junto a Pasahegos (Zamora). El Negro Celta, procedente de una cantera cerca de Fresno de Sayago (Zamora), es una granodiorita-monzo-granito biotítico, de grano medio-grueso y tono gris medio con abundantes megacristales blanquecinos. La producción, de grandes bloques, en este momento no es continua. El Rojo Sayago se extrae de una cantera en Piñuel (Zamora). Es una episienita de grano grueso, porfídico, de tono rojo.
El Gris Mezquita se extrae de forma ocasional en grandes bloques en San Ciprián (Zamora). Es un granito de dos micas, de grano medio y color gris claro, con algún cristal de feldespato blanco de tamaño ligeramente superior al resto. En los alrededores de Vitigudino, Salamanca, se explota el Gris/Amarillo Atiber, un granito de dos micas de grano medio, equigranular, del que se obtienen bloques de mediano tamaño y que es empleado para la elaboración de placas de cierto grosor y otras piezas de construcción y ornamentación. Recientemente se ha abierto una cantera en Navalperal de Pinares (Ávila) de donde se extraen los granitos Rubio,
Gris y Blanco Retse, destinados principalmente para urbanización y espacios públicos. Se trata de un pórfido, un monzogranito de grano grueso y un leu-cogranito de grano fino. Asimismo, es de destacar la existencia de varios municipios con gran tradición en cantería y labra manual, como Cardeñosa, en Avila y Los Santos en Salamanca. En varias localidades de Avila (El Hoyo de Pinares. San Juan de la Nava y Narrillos del Rebollar), en La Lastrilla (Segovia), en Villavieja de Yeltes (Salamanca) y en Villamor de Cadozos (Zamora) se extraen pequeñas cantidades de forma esporádica. En Sorihuela (Salamanca) se van a abrir canteras próximamente.
En todas estas localidades se benefician, en varias canteras, granitos biotíticos grises, de grano medio más o menos porfídico, como el Gris Los Santos y el Gris Cardeñosa y, en esta localidad, además, el denominado Rubio (granito de dos micas, de grano medio y fino, equigranular, de tonos beige-amarillentos y casi blanco a cierta profundidad). Se emplean en la confección de adoquines, losas, dinteles, columnas, bordillos y demás piezas para la construcción y ornamentación y amueblamiento urbano. El Azul Villa de El Losar (Ávila) y el Gris Espinar (Segovia) en este momento no se están explotando y el Gris Segovia de La Lastrilla (Segovia) se extrae en pequeña cantidad, de forma muy esporádica. Una variedad intermedia entre un granito y una arenisca silicificada es el llamado Caleño o Piedra Sangrante de La Colilla (Avila), utilizado en los monumentos de la capital y que actualmente sólo se emplea en su restauración.