A pesar de que la foto en si parece indicarnos un bonito paisaje, en realidad no lo es tanto. Afortunadamente, hasta el momento, no quedan registrados los olores. Y es que, lo que vemos en la imagen no es ni más ni menos que la prolongación de los desagües del pueblo, ya en territorio de la Dehesa. Justamente donde se proyectó hace unos años establecer un complejo depurador de aguas residuales y que por diversas cuestiones aún no se ha construido. El arroyo desembocará a unos centenares de metros en el río Yeltes.