Llevo unos días recorriendo la zona para fotografiar diversos puentes realizados por los canteros de Villavieja. Ayer estuve el El Cubo y el día anterior en el Puente Resbala. Hoy me tocaba Villares. Como era bastante temprano, tuve que adentrarme por el camino de Pedro Álvaro a fin de no tomar la imagen del puente a contraluz. Aproveché la ocasión para recorrer la orilla del rio Yeltes en dirección a Pedro Álvaro. Tras casi hora y media de paseo ribereño, regresé a Villarres para, ya de paso, fotografiar el castillo. La verdad es que resulta dificil conseguir hoy día una instantánea medianamente potable sin que la gran mole de casa construida a escasísima distancia delante del castillo y pintada de blanco -podían haber forrado sus muros exteriores con la típica pizarra del lugar- no arruine la toma. La vista ideal desde el rio resulta imposible, asi que hay que buscar la imagen desde el lado contrario. Aún así, lo mismo que en Villavieja, no pueden faltar los sempiternos cables de Iberdrola o Telefónica o de las dos. En fín aquí tenéis unas instantáneas del castillo, cuyas almenas aparecen ampliamente colonizadas por cigüeñas y palomas. Me llamó también la atención un muro lateral que presumiblemente formaba parte de un recinto defensivo situado alrededor de la torre y en el que se aprecian algunas troneras.
A la parte occidental del pueblo, se yergue una torre medieval, hoy aislada de otras estructuras de fortificación; pero, a las que, en tiempos atrás, debió de estar unida: se aprecian los arranques de un arco que salvaría la distancia entre el lienzo paralelo del muro norte de la torre y ésta misma. La mencionada torre es de planta rectangular. Se halla construida en mampostería de pizarra y esquinada en granito, y su único vano de entrada, adintelado, se abre a nivel del suelo. El espacio interior se hallaba dividido en 4 pisos de madera. La parte superior de los muros, todavía conserva el almenado. El lienzo que discurre paralelo al muro nordeste de la torre, tiene un espesor de 1,80 m. En él se abrieron varias troneras para el uso de la artillería. Tales elementos defensivos aparecen en otras muchas fortalezas construidas en el siglo XV, como lo es esta misma de Villares de Yeltes. La configuración de ciertos restos, que rodean la torre, sugiere la existencia de un antemuro que la cerraría por 3 de sus lados. La fachada principal del torreón mide, de lado, 9,60 m., y 7,10 m. los muros adyacentes. El espesor del muro donde se abre el vano de la entrada, es de 1,20 m., y la anchura de éste es de 0,80 m.
(Tomado de Wikipedia)
