15 de febrero de 2006

Pregon de Fiestas 2000


PREGÓN DE FIESTAS
24 de Agosto de 2.000)
Juan Agustín Madruga Blanco

PREÁMBULO
PREGÓN FIESTAS VILLAVIEJA DE YELTES AÑO 2000

Antes de comenzar este pregón, permitidme unas breves palabras.

Desconozco si lo que hoy voy a contaros aquí es un pregón y si ha existido algún pregón que necesitase preámbulo, pero lo escrito, como pregón nos tiene que valer, y el preámbulo, las circunstancias personales vividas días pasados me han obligado a hacerlo.

Mirad, la muerte de mi madre me ha hecho plantear seriamente el estar o no en este acto, pero después de varias conversaciones, en algunos casos emocionadas y después de muchos quebraderos de cabeza, he llegado a la conclusión de que debería de estar aquí y aquí estoy.

Pero estoy no como homenaje a mi madre y por añadiduría como homenaje a mi padre, mis padres no necesitan homenajes, sólo necesitan VIDA y esta por desgracia es lo único que no podemos darles.

Estoy aquí porque si en algún momento de este pregón reivindico esperanza y futuro para este pueblo, esto solo se consigue si cada uno de nosotros, en este caso yo, somos capaces de vencer las dificultades, pequeñas o grandes, que la vida nos va poniendo a cada uno y porque si algo especialmente aprendí de mi madre, y de esto tenía mucha experiencia, es que lo importante es que, pase lo que pase a tu alrededor, hay que tirar para adelante, hay que seguir viviendo.



PREGÓN FIESTAS VILLAVIEJA YELTES - AÑO 2.000

DESDE MIS SENTIMIENTOS

Queridos paisanos:

Dice el Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua que Sentimiento es "Acción o efecto de experimentar sensaciones producidas por causas externas o internas"

Pues bien, en estas fechas, marcadas por cada uno en el calendario, para el reencuentro con el pueblo y con los amigos y sobre todo para la fiesta, la juerga y la alegría, son también fechas en las que afloran una mezcla de sentimientos y emociones provocados por cosas, personas y sensaciones que viven y son de nuestro pueblo Villavieja de Yeltes.

Sentimientos en muchos casos confusos y que posiblemente se manifiestan de forma muy diferente en cada uno de nosotros, sobre todo influenciados por los acontecimientos recientes que a cada uno nos haya tocado vivir, pero sentimientos al fin y al cabo que permiten recorrer todo una vida y la relación que existe entre esta, cada uno de nosotros y nuestro pueblo.

En mi caso, sentimientos nunca experimentados aquí, de mi niñez en Villavieja sólo tengo recuerdos, sino sentimientos que se manifiestan desde la lejanía, desde mi lugar de residencia, sentimientos por tanto diferentes a los que experimentan los que viven aquí, pero al fin y al cabo mis sentimientos.

1.- Sentimiento de Tristeza:

Tristeza mezclada con ignorancia y extrañeza como la de un niño totalmente inmaduro que sin apenas entender nada y con once años tiene que abandonar su casa, su familia, su entorno y sus gentes buscando algo que los mayores resumían en .... "hijo si quieres ser algo de mayor"..., y nos enviaban a Ciudad Rodrigo, Zamora, Salamanca, e incluso más lejos........cuando erróneamente la mayoría de los niños no queremos, perdón, no quieren ni deben desear ser algo de mayores, sino que solamente quieren ser niños.

Tristeza de los padres, y esto lógicamente sólo se descubre cuando uno es padre, que buscando un futuro mejor para sus hijos se desprenden de los más importante que para una familia existe, que es el contacto diario con sus hijos, verlos crecer, escuchar sus quejas y sus emociones y ver como van sintiendo en cada momento.

Tristeza confundida con ilusión como la que muchos de vosotros experimentasteis cuando "buscando mejor vida" abandonasteis este pueblo y os marchasteis a otras tierras mientras vuestro corazón y vuestra cabeza estaban pidiendo lo contrario o si no ¿quién de vosotros si hubiese podido quedarse en Villavieja, no lo hubiese hecho?.

Tristeza entrelazada con intranquilidad de todos aquellos que las circunstancias, familiares o personales, os obligaron a quedaros sin saber que sería de vosotros ante la incertidumbre de un futuro nada claro. Pero tristeza mezclada con el agradecimiento de parte de todos los que marchamos porque vuestra inmovilidad ha permitido que este pueblo siga existiendo.

Todos los que marchamos fuera y hemos vuelto podemos haber ayudado y contribuido a que este pueblo crezca pero que a ninguno de nosotros nos quede la menor duda si algo puede crecer es porque existe y Villavieja sólo ha podido existir por todos aquellos que os quedasteis (Vaya desde aquí mi agradecimiento)

Tristeza unida al recuerdo de todos los seres queridos que se han ido quedando en el camino. Para aquellos que de una o más generaciones somos descendientes de Villavieja, toda pérdida de un familiar o amigo está unida inevitablemente con este pueblo, y en serio no sólo se me arruga el corazón sino que se me encoge todo cuando miro a un lado y a otro y empieza a haber huecos y se empiezan a notar ausencias, alguna de ellas muy dolorosas.

Pero en cualquiera de los casos tristeza de todo aquel, y esto nos ha pasado a todos, que las circunstancias le han obligado en un momento de su vida a hacer lo contrario de lo que hubiera deseado.


2. - Sentimiento de nostalgia

Nostalgia no confundida con tristeza.

Si somos capaces de hacer un pequeño esfuerzo mental y sentir esta nostalgia como añoranza aunque sea mezclada con algo de melancolía, experimentareis, como yo, una de las sensaciones más agradables que este pueblo nos puede hacer experimentar porque aunque esta nostalgia se pueda confundir igualmente con pena, no es más cierto que se añora aquello que se tiene, aunque sea en la lejanía, se siente nostalgia de aquello que se quiere y se tiene. Aquello que no se tiende sólo se puede recordar.

La misma nostalgia que experimentaba aquel chaval que desde mi lugar de estudios, Ciudad Rodrigo, me hacia sentir la llegada del "fardel" todos los martes.

Aquel fardel que contenía una parte de la riqueza y exquisiteces culinarias del pueblo, que olía a ropa limpia pero que sobre todo desprendía aromas de Villavieja.

Nostalgia mezclada con libertad como la que muchos de vosotros, al marchar al extranjero encontrasteis en otros países. Reconozco que ha debido de ser muy duro y difícil abandonar no sólo tu pueblo sino tu país donde además de perder el contacto con los seres queridos os encontrasteis con la mayor dificultad que para todo ser humano existe que es la dificultad para expresarse la imposibilidad de haceros entender sin embargo, al menos encontrasteis la libertad suficiente y necesaria para poder soportar esa lejanía.

Pero nostalgia también de todos los que os quedasteis con la intranquilidad de desconocer vuestro futuro si es que este existía, ahora hemos visto que sí, y que al contrario de lo que sentíamos los demás sentías añoranza y nostalgia por los que marchamos.

Nostalgia mezclada con el recuerdo de estos lugares, como la que se siente cuando nos encontramos con otros paisanos allí donde vivimos. Os puedo asegurar que, en mi relación con Villavieja, hay pocas sensaciones más agradables que esos momentos.

Pero siempre, os repito, nostalgia como sentimiento agradable, nostalgia que muchas veces nos hace idealizar hechos y lugares de este pueblo y en definitiva nostalgia no como sentimiento de pena o de melancolía sino como añoranza y deseo de reencontrarnos de nuevo aquí.

3. - Sentimiento de Alegría

Y una vez en Villavieja, sentimiento de alegría.

Sentimiento que, quizás por los momentos personales que actualmente estoy viviendo, ha sido el más difícil de plasmar en un papel.

Sería capaz de estar hablando horas y horas de las manifestaciones de alegría que me sugiere Villavieja, porque la alegría está en todos y cada uno de sus rincones.

Ya es alegre el simple hecho de acercarse aquí, quién no se ha sentido alegre y más y más contento a medida que se acerca a Villavieja, alegría más intensa cuanto más lejos resides, quién no ha sentido alegría cuando se acerca por el Barrero, por el Sierro, por la trincheras.....

Alegría en la gente.

Hay un dicho popular que dice ... "quién de lejos lo parece de cerca lo es.." pues bien yo no conozco a nadie en este pueblo que desde lejos se vea que puede estar enfadado con el mundo que tenga cara de "cabreo" y esto es porque salvo raras excepciones que no vale la pena mencionar aquí la gente es alegre por naturaleza.

Alegría en sus lugares

Mirar, cuando se hace una encuesta sobre los gustos de la gente, sobre los lugares preferidos por unos y por otros para pasar unos días de vacaciones o incluso sólo unos días de descanso, siempre se plantea una dualidad o mar o montaña.

Pues yo digo no, ni mar ni montaña, ni agua ni nieve, yo prefiero la tierra llana y seca de Castilla, yo digo tierras de Villavieja.

Habrá lugares más vistosos, de mayor colorido, que estén en más alto o que estén más en valle pero si unimos los aspectos pictóricos a los asuntos emocionales, ¿alguno de vosotros conoce algún lugar más hermoso, de un aspecto y circunstancia tal que sea capaz de infundir más alegría que estos lugares?, claro que no, porque no existe.

Alegría en sus fiestas

Claro que todas las fiestas son alegres, pero es que las de aquí son especiales.

Ninguna fiesta mejor entre todos los alrededores que las de Agosto, ninguna fiesta más alegre más divertida ni de más ambiente que la que dentro de pocos días celebramos.

Pero además, ninguna fiesta en el mundo más entrañable que Nochevieja en Villavieja , como dice la canción.

Ah!! Por si no tengo otro momento mejor sirva este pregón como también momento de manifestación de alegría reivindicativa y pido al Ayuntamiento que una fiesta como esa, fiesta del pueblo aunque sufragada por los padres de los quintos, pase a ser fiesta grande de Villavieja , que ya lo es, pero soportada por el pueblo.

Alegría en sus canciones

Si una canción es quizás una de las manifestaciones externas más claras de la alegría de los pueblos, no existe lugar en el mundo donde, por lo menos hasta ahora, de cada hecho ya sea transcendente, curioso, insignificante o incluso satírico no se haya contado al mundo mediante una canción.

No es el momento de recordar todas las canciones que hablan o dicen de Villavieja pero si tenéis curiosidad haced un poco de memoria e intentar recordar que hecho no se ha cantado en este pueblo, si hasta los que estamos por ahí comentamos:"...... si se enteran de esto en mi pueblo me sacan cantares....."


4.- Sentimientos de rabia y de impotencia

Rabia por el abandono al que todos los pueblos de Castilla, en general, y nuestro pueblo en particular, se ha visto sometido.

Nadie, ni antes en épocas más complicadas y difíciles para casi todos, ni ahora en unos momentos de mayor libertad, se ha preocupado de aportar algo que realmente permita a estos lugares vivir y crecer con posibilidades reales de futuro, si acaso nos conceden alguna subvención que "tapa agujeros" pero que al final remedian poco.

Y no nos engañemos, en el aspecto de abandono de estos pueblos, las situaciones son las mismas, sino ¿alguno de vosotros me sabe indicar la diferencia que existe en el hecho de que hace algunos años no fructificara la creación de una cooperativa de curtido que hubiera generado futuro, riqueza y prosperidad a la ausencia en estos momentos, por ejemplo, de una asociación o cooperativa de agricultores o la falta de un taller de cantería?.

Y nadie me podrá indicar diferencias sustanciales y de fondo porque en ambos casos, y repito en épocas aparentemente tan diferentes, las causas son las mismas, nadie, con poder, permitirá que iniciativas del pueblo llano prosperen porque perdería el control sobre ellas y esto no se lo pueden permitir.

Y las consecuencias también son las mismas, se acabó, salvo para algunos nostálgicos la industria del curtido, se acabó, y creo que definitivamente la cantería, (¿Qué fue de aquellos famosos canteros de Villavieja? De los que todos alguna vez hemos presumido.) y se acabará, si nosotros no lo remediamos, la agricultura.

Por favor que nadie se confunda todos estos hechos se repiten porque los centros de poder no han variado y que nadie venga a decirnos que las gentes de Castilla somos conformistas, poco emprendedores y escasamente reivindicativos, lo que ocurre es que nadie nos han permitido ser otra cosa.

Rabia futurista porque se me ocurre que cualquier día, en aras de una ecología y una protección medioambiental mal entendida, y a este pueblo que alguna vez se manifestó contra los cementerios nucleares de la Arribes será bastante fácil convencernos, nos venderán la energía ecologista, la energía alternativa, la energía limpia y que preserva el Medioambiente, y ofrecerá al Ayuntamiento dinero y hipotéticas mejoras y un futuro próspero y sin preocupaciones de presupuesto a cambio de instalar aerogeneradores, esos molinos que vemos por todos los montes de España y que nada tienen que ver con Don Quijote.

Molinos que colocarán, se me ocurre, en el Sierro o en la Brezosa y repito de nuevo, no nos engañemos si la gestión de estas instalaciones no depende del propio Ayuntamiento, como así sería deseable, sino de las Grandes Compañías Eléctricas, estaremos en la misma situación de siempre, dependeremos de los mismos, aquellos que primero impidieron que continuara el negocio del curtido o que más tarde han permitido que la cantería desaparezca y que impedirán que prospere la agricultura...

Rabia mezclada con impotencia de ver que, en definitiva, siempre son los mismos quienes deciden por nosotros y de que estos lugares vamos sobreviviendo de situaciones coyunturales, antes una actividad minera que algunos les interesaba, y que cerró cuando a ellos le interesó, después el negocio de la construcción, y mañana que..... y rabia porque , a pesar de mi profesión, si las situaciones de fondo no cambian, prefiero que en el Sierro o en la Brezosa haya encinas en lugar de molinos de viento.

5.- Sentimiento de Esperanza.

A pesar de la cruda realidad indicada anteriormente, sobre todo y siempre, Villavieja inspira esperanza sobre todo esperanza y futuro.

Porque a pesar de las enormes dificultades y la multitud de trabas que entre unos y otros nos han ido poniendo este pueblo continuará porque existe futuro para este pueblo y porque aunque individualmente no experimentemos nada, todos y cada uno de nosotros y siempre dentro de nuestras posibilidades estamos haciendo cosas unas veces más sencillas y otras más complejas para que Villavieja avance.

Ilusión y esperanza y no sólo porque a estos pueblos sólo nos quede el deseo de que las circunstancias cambien y no tanto la esperanza en que aquellos que tienen capacidad y poder de decisión decidan cambiar el rumbo de estos lugares, porque cuando lo hagan será para su propio provecho, sino por que tenemos que tener el convencimiento de que las cosas cambiarán porque todos los que estamos aquí queremos y podemos cambiarlas.

Porque tengo la seguridad de que si se cotizan las construcciones de granito, si en otros lugares la industria de la piedra, natural o artificial es próspera, y si nosotros tenemos la materia prima como son las peñas de la dehesa, algún día a alguien se le ocurrirá la idea, si la iniciativa parte de la Administración Pública mejor, que si aquí hemos tenido los mejores canteros del país porqué no podemos tener una actividad de la piedra envidiable.

Porque, quizás, también a otros animados e impulsados por los primeros se les ocurra que ¿porqué no poder de nuevo en pié las tenerías? Y volver a vivir y sentir aquel olor raro, extraño que desprendía la industria del curtido y así poder pregonar con orgullo que en nuestro pueblo tenemos una calle donde existen tenerías y no una calle que recuerda que en Villavieja una vez existieron tenerías.

O, quizás mejor, todos los que en Villavieja viven de la agricultura tengan la ocurrencia de que asociándose o formando cooperativas se pueden conseguir infinidad de mejoras.

La misma esperanza e ilusión que nos hace vivir y levantarnos cada día con el deseo de que hoy sea mejor que ayer.

Si nuestro pueblo, ha sido capaz de sobrevivir y vencer la dificultad que para un lugar como éste supone no estar en medio de nada, de no ser paso para nada, hay que venir a Villavieja porque nada pasa por Villavieja, seguro que será capaz de seguir viviendo.

Como veis he repetido machaconamente la palabra esperanza, pero es que no es posible entender este pueblo sino es así, porque me niego a creer que la gente mayor y no tan mayor construye aquí su casa, y mirar que hay casas nuevas en este pueblo, para terminar y pasar aquí los últimos años de su vida, la gente viene y vive aquí por que este pueblo le proporciona algo que no puede ser otra cosa que ilusión y esperanza de un futuro mejor.

Ya para terminar quisiera transmitir mi agradecimiento al Pueblo de Villavieja que a través de la petición del alcalde, me habéis permitido expresar lo que siento.

Sentimientos que me han acompañado y me acompañarán a lo largo de mi vida y que se han manifestado y los he experimentado de muy diferentes formas, bien porque las circunstancias coyunturales así lo han provocado, bien porque con edad diferente, lógicamente se siente diferente pero sobre todo porque Villavieja está viva y hace que los mismos sentimientos se manifiesten de forma diferente cada vez.

Estas breves palabras escritas en aeropuertos, aviones, trenes y estaciones de ferrocarril y que posiblemente tengan enormes defectos lingüísticos y que en algunos casos puedan incluso confundir los sentimientos con sensaciones y estados de ánimo, y que como podéis imaginar, en los pocos días que llevo de vacaciones, las he repasado muchas veces han supuesto, para mi, una enorme alegría al comprobar que todo lo que aquí he escrito y contado no son sólo palabras entrelazadas con más o menos sentido sino que son la realidad de este lugar, pues Villavieja más que sus historia, más que sus gentes y más que sus esfuerzos y trabajos por sobrevivir, VILLAVIEJA ES AQUELLO QUE VILLAVIEJA NOS HACE SENTIR, PORQUE VILLAVIEJA ES SENTIMIENTO.

-Muchas gracias y felices fiestas.