Por todos los mayores es conocido que hace ya unos cuantos años, cuando el medio de comunicación más habitual era el correo ordinario, había quien volvía a utilizar los sellos de las cartas que recibía, sobre todo si no estaban matasellados, cosa poco probable, o las marcas del matasello podían ser borradas o eliminadas facilmente. Pues bien, algo por el estilo pasó en nuestro pueblo en 1924, pero con un resultado poco agradable para el remitente...
Una carta salió de Villavieja con destino a Pozos de Hinojos. Llevaba dos sellos uno de 20 céntimos de peseta y otro de 5. La misiva pasó a través de la estafeta de Vitigudino y allí un funcionario eficiente, seguramente experto en estas cuestiones, notó algo anómalo en los sellos, y ... ¡expediente al canto!. Se avisó a la persona destinataria que tuvo que ir a recoger la carta a Vitigudino, pero tuvo que dejar en poder de la administración de correos el sobre y además la identidad del remitente, que no constaba en el exterior. El expediente pasó por la "administración subalterna" de Lumbrales de cuya oficina dependía el puesto de Villavieja y por fin llegó al Ayuntamiento de nuestro pueblo:
Póngase por cabeza de estas diligencias la comunicación recibida de la administración subalterna del Cuerpo de Correos de Lumbrales y demás documentos que son adjuntos a la misma, y en su cumplimiento, y por el hecho de haber utilizado el vecino de esta villa C.S.M. un sello usado en la carta que también se acompaña, procede y desde luego impongo a dicho individuo la multa de cinco pesetas que hará efectivas en papel de pagos del estado, dentro del improrrogable plazo de diez días. Notifíquese al interesado dicha resolución para su conocimiento y efectos y para en el caso de que haga efectiva la multa, se dé de ello cuenta a la administración en principio referida. Así lo acuerda, manda y firma, el señor alcalde don Gonzalo Alonso Manzanera, en Villavieja de Yeltes a veintitrés de enero de mil novecientos veinticuatro, de que yo el secretario certifico.
El Alcalde Gonzalo Alonso
El secretario Gabriel Martín
El interesado pagó la multa, como se puede comprobar por el resguardo del papel de pagos al Estado adjunto también al expediente.