21 de agosto de 2011

Herraderos

Fot.: Mundo Gráfico, 13 de Abril de 1927

Probablemente una de las actividades "festivas" más entrañables para los otrora ganaderos de esta tierra charra eran los herraderos:

Si quieres placer sincero
que no te cueste dinero
y un pasatiempo chocante
vete a ver un herradero
al pueblo de Fuenteliante
Tiene esta fiesta aldeana
que empieza por la mañana
y hasta muy entrada la noche
es un continuo derroche
de regocijo y jarana ...

(Saturnino Galache, "Charras", 1915)

Esta tarea del herradero, realizada funfamentalmente a finales del invierno y comienzo de la primavera, propiciaba una serie de jornadas de trabajo, pero también de festejo y diversión, a las que solían acudir los ganaderos de las dehesas vecinas: cacerías, herradero, tientas, comer, beber, .....
Veamos como nos cuenta El Adelanto uno de estos festejos:

Con una cortesía y una amabilidad que yo agradezco en todo lo que valen, fui invitado, días pasados, a una tienta y un herradero (faenas que tendrían el prólogo de una gran cacería), dé los becerros y de las vacas pertenecientes a la ganadería de nuestros queridos amigos y suscriptores don Francisco y don Ignacio Rodríguez, de Fuenteliante. Sintiéndolo muy de veras, no pude asistir a estas agradables fiestas, pues ya saben ustedes que los periodistas “no somos dueños de nuestra persona”, y que, cualquier suceso, por “político” que sea, requiere nuestra inevitable permanencia en la redacción. Así es que, en vez de gozar, duran te tres días, de las dulzuras que el campo proporciona y de los infinitos y espléndidos agasajos de los señorea de Rodríguez no he tenido otro remedio que “acogerme” a Canalejas con todo el movimiento político que se ha traído, y buscar consuelo a esta contrariedad en el regocijo que la política proporciona siempre. Sirvan pues, estas líneas a los señores Rodríguez, de justificación a mi ausencia, que repito, he sentido con toda mi alma. Pero aun cuando yo no fui —y creo que con ello nada se perdió -iba de Salamanca un invitado (mi querido amigo don Santiago Mateo) a quien le di el encargo de tomar notas de las fiestas celebradas, y tan a la perfección lo ha hecho, que yo sólo haré ahora copiar los apuntes que me acaba de entregar.

Tanto el herradero como la tienta, se celebraron en Cubo de Don Sancho, donde los señores Rodríguez poseen, en arriendo, una dehesa, con una buena plaza para estas faenas. La cacería se verificó en los montes inmediatos. Fué ésta el día 15, y como resultado de ella, puedo afirmar que se cobraron centenares de liebres, conejos y perdices. Fué una cacería digna de los cazadores pues entre éstos los hay buenos de verdad.

El día 16 fueron herrados 51 becerros y 46 hembras, todos de casta, añojos y finos, que en su inmensa mayoría se calificaron de superiores. , Al siguiente, día, 17, se tentaron 50 vacas erales, de hermosa lámina, finí simas, codiciosas y bravas como jaba tos. ¡Qué juego no darían, que una de ellas no hizo más que salir a la plaza y sembrar un pánico indescriptible entre los encargados de tentarlas y entre los invitados que presenciaban la fiesta! Y como prueba de ello, pueden preguntarlo al propio ganadero, a don Manuel Sánchez y a don José María Galache, a los que revolcó de modo aparatoso. A don Francisco Rodríguez (quizá por tener más confianza con él, por ser su amo), le empitonó la vaca por una pierna, dándole un regular susto. Estas faenas resultaron agradabilísimas en extremo Y si a esto se añade la amabilidad y la esplendidez de los señorea de Rodríguez y sus respetabilísimas familias, como así también de sus bellas y encantadoras hijas Consuelito e lnesita, de todos los cuales vienen los invitados altamente agradecidos, ayúdenme ustedes a pensar en lo bien que lo habrán pasado y en los excelentes ratos que yo me he perdido por culpa... de Canalejas... A estas fiestas asistieron buen número de invitados, entre los que estaban don Santiago Mateo y don Iván Iscar, de Salamanca; don Rogelio Miguel del Corral, don José María Calache, don Andrés y don Tomás García, de Villavieja; don Mariano Criado, don Manuel Sánchez y don Nicanor Criado, de Vitigudino; don Eduardo García, don Francisco Antonio Rodríguez y don Jenaro Galache, de Fuenteliante y don Gaspar Marín y don Agustín Marín, de Cubo de Don Sancho; los cuales salieron del Cubo contentísimos por las deferencias y obsequios de que fueron objeto por parte de los inteligentes y simpáticos ganaderos.
El Timbalero
El Adelanto, 10 de Febrero de 1910