Transcribo a continuación unos versos que a finales del siglo XIX, concretamente el 31 de Diciembre de 1892, alguien dedicó al nuevo año que se avecinaba, el 1893. Se publicaron en "La Semana Católica" de Salamanca. Me quedo con un par de dichos versos:
Hoy eres una esperanza.....
no acabes en desengaño!
¡Feliz Año Nuevo 2011!
Año que vas a nacer
Tras unas horas no más,
¿Quién sabe lo que serás;
Quién ¡ay! lo que vas a hacer?
¡Bien vengas si vienes, año,
Como un iris de bonanza!.
Hoy eres una esperanza.....
no acabes en desengaño!
Pon tus esfuerzos a prueba,
Remueve al mundo en su base;
Tu programa está en la frase
«Año nuevo, vida nueva».