El próximo día de San Pedro dará, en Villavieja, una conferencia a los obreros, el notable orador socialista don Casimiro Muñoz.
Una escueta noticia que a mi me impulsó a buscar quién era ese notable orador socialista que se había acercado hasta Villavieja apenas un año después de constituirse en nuestra localidad la denominada "Agrupación de Trabajadores" , que dicho sea de paso, fue una de las primeras en funcionar en la provincia salmantina. Así pues, me lancé de lleno a la "busca y captura" de ese personaje socialista. Con el paso del tiempo, las notas y los datos comenzaron a llenar varias páginas de uno de mis cuadernos de trabajo, asi como una carpeta en el disco duro de mi portátil. La primera sorpresa me la llevé cuando encontré que el notable orador socialista era un mirobrigense. La proximidad entre Villavieja y Ciudad Rodrigo podía explicar por tanto fácilmente su presencia en nuestro pueblo. Si os soy sincero, quedé un poco defraudado. Esperaba que hubiese sido un personaje de campanillas, alguien de 'altos vuelos' dentro del aparato sicialista de la época. Así que mis ansias investigadoras se diluyeron un tanto. Y ahí quedó la cosa. Pasados unos días volví sobre el asunto. De repente apareció Unamuno. Resulta que Casimiro Muñoz y el que fuera rector de la Universidad salmantina eran amigos. La cosa se ponía un poco más interesante, así que me dediqué a una búsqueda más exhaustiva. Y saltó la sorpresa. ¡La gran sorpresa! Resulta que Casimiro Muñoz escribía a veces en la prensa salmantina (El Adelanto, Noticiero Salmantino, …) y en un ejemplar de entonces me encontré con una crónica de Casimiro como enviado especial al Congreso Internacional Socialista de Paris. ¿Cómo era posible que un periódico de provincias pudiese enviar en aquellos años a un periodista para cubrir un evento de ese tipo? Para mi resultaba incomprensible, así que me tuve que leer todos los periódicos de aquellos días para poner entender el, para mi, misterioso asunto. Hasta que encontré el dato clave: Casimiro Muñoz fue como delegado del Partido Socialista a dicho Congreso, acompañando a Pablo Iglesias, Facundo Perezagua y Antonio García Quejido, que además representaban también a la UGT en dicha reunión. Al final como véis, resultó que era uno de los socialistas de altos vuelos, ¡un mirobrigense en la cúpula del PSOE y UGT de entonces! Pero en aquellos tiempos, era un socialista atípico. No era obrero, era comerciante. Y, al parecer, con una desahogada posición económica lo cual le permitía entre otras cosas viajar al extranjero a su costa y no a la del partido. Pero vayamos por partes. Intentaremos en las líneas que siguen poner en claro algunos datos biográficos.
Casimiro nació en Ciudad Rodrigo el 4 de Marzo de 1849, siendo bautizado en la Parroquia de San Andrés extramuros, de dicha ciudad. Fueron sus padres Hermenegildo Muñoz, natural de Tenebrón y Josefa Matilla, natural de Abusejo.
Nada más sabemos de él hasta 1868. Recordemos que en ese año tuvo lugar la famosa "revolución" también denominada "la Gloriosa" o "septembrina" que terminaría con el destronamiento de la reina Isabel II. En esa época Casimiro trabajaba como tipógrafo en la imprenta que editaba el periódico "La Reforma" de Madrid. Y lo sabemos porque es uno de los personajes que don Benito Pérez Galdós hace aparecer en el capítulo XXXIII del último libro de la Cuarta serie de los Episodios Nacionales titulado "La de los tristes destinos".
... El joven de la levita y chistera (ambas prendas harto deterioradas, rugosas y polvorientas por el extremado roce que habían tenido con las multitudes populares en aquel agitado día) era un tipógrafo natural de Ciudad-Rodrigo, llamado Casimiro Muñoz, que trabajaba en el periódico de la tarde La Reforma, fundado por Manuel Fernández Martín, y que tenía su imprenta y redacción en la Plazuela de Lavapiés, esquina a la calle del Tribulete...
Parece ser, que Casimiro tuvo una actuación destacada en el sentido de evitar con su actuación el saqueo del Palacio Real. El que años más tarde fuera compañero de fatigas, Juan José Maroto Caldeira, tipógrafo, periodista y miembro del Partido Socialista, lo relata en el artículo que le dedica de su serie "Los redentores del Obrero" publicado en el diario "La Libertad" el 30 de Septiembre de 1930:
Contaba unos veinticuatro años; había nacido en Ciudad Rodrigo; era cajista de imprenta -a la sazón con plaza en La Reforma - vivía con unos patrones en la calle del Humilladero; tenia aun más instrucción y mas despejo que los necesarios para ejercer bien el noble arte; era de talla, color y figura agradables, lo que, con el índunento entonces obligado de todo cajlsta que se estimara, le daba cierta prestancia y hasta autoridad, y profesaba ideas democráticas templadas, esto es, encontraba mal el barullo, la vocinglería y el desorden.
En "La de Bringas" , primero, y "La de los tristes destinos" , después, Galdós narra una hazaña gloriosa de este hombre modesto, obscuro y bueno, con cuya amistad nos honramos hace años, porque después de una vida tranquila, no infecunda para el bien, volvió al no ser sin dejar estela de odios ni rencores.
En la noche de aquel lunes lluvioso de 28 de Septiembre se susurró en el periódico la noticia de haber sido derrotadas en Alcólea las tropas del general Novaliches, y cuando en la madrugada del 29 Casimiro salió pera su trabajo, supo que el famoso Comité secreto, que venia funcionando en Madrid y publicando un Boletín revolucionario, se había entendído con el Jefe del Gobierno, el marqués de la Habana, para formar una Junta que evitase desmanes e hiciese pacifico el tránsito; asimismo conocía la alocución al vecindario, que firmaba el susodicho D. Manuel de la Concha, marques de la Habana.
Marchó a la imprenta, y el periódico quedó despachado en un periquete, porque casi no contenía más que telegramas, la alocución y la noticia de que un muchacho, encaramado en los hombros de otro y mirando a los balcones del Principal, había lanzado el grito maravilloso de ¡Viva la libertad.', que primero repercutió en todo Madrid, luego resonó en toda España, y, a no tardar, llenó los ámbitos del Mundo, entonces tiranizado, que convirtió sus miradas ansiosas, llenas de Ilusión, a esta pobre España, esperando que la libertad llegaría a la Francia imperial, a la Roma papal, al Austria, a Alemania, a Polonia, a la Europa opresa.
Era martes y seguía al tiempo lluvioso. Casimiro comió y se acicaló como de costumbre, ciñendo la levosa, no mal cortada, y cubriéndose con el sombrerote de copa, y se lanzó a la calle, encaminándose primero, al Parque de Artillería, donde el pueblo se proveía de armas, y después, marchando a Palacio, con intento, acaso, de ir luego a la Casa de la villa.
En Palacio se detuvo. Un grupo numeroso de gentes del pueblo -y muchos del grupo llevaban armas- quería asaltar la que había sido morada de la reina, y el buen Casimiro encontró mal aquella intentona, que desacreditaría el movimiento y de la que se derivarían choques sangrientos, ya hubiese en las habitaciones -como la había-fuerza armada de alabarderos, ya la Junta revolucionarla envíase elementos, también armados, para reprimir o impedir el saqueo. Casimiro contuvo a los asaltantes, dirigiéndoles la palabra autoritariamente "como delegado de la Junta revolucionaria", y esto a petición de un empleado de la Intendencia y en hojas de papel de barba escribió con buena letra una especie de carteles, que decían: "En este edificio existen delegados de la Junta provisional" Fijó los carteles en las puertas, haciéndose auxiliar Casimiro por los mismos hombres que parecían dispuestos a destruirlo todo, y con este mismo auxilio echó a los mas revoltosos, constituyó una especia de guardia, y no pasó nada.
Un alabardero, vestido de paisano, acudió al Ayutamiento a decir lo que ocurría y la Junta provisional aprobó y completó lo hecho por Casimiro, no sin dilaciones y titubeos, porque andaba en jaleos de constitución, jaleos de vanidad, ambición y faroleo...
En 1871 se constituiría la "Asociación del Arte de Imprimir", siendo Casimiro Muñoz uno de los fundadores. El objetivo de este grupo consistía en encontrar empleo a los obreros parados y mejorar las condiciones laborales de los tipógrafos. Dos años más tarde, Pablo Iglesias solicita el ingreso en dicha Asociación y al año siguiente fue elegido su presidente. Cinco años más tarde (1879) se fundaría el Partido Socialista Obrero Español. Es, por tanto, de esos años de donde le viene a Casimiro su amistad con Pablo Iglesias.
Continúa Maroto en su artículo de la siguiente manera:
...Pasaron mas años. Casimiro marchó a su tierra, a Ciudad Rodrigo. donde llegó a ser dueño de la mejor imprenta y de la mejor librería, y dueño también de bienes raíces. Entonces se acordó de su viajo amigo Iglesias y de las ideas socialistas, y se inscribió en el partido y trabajó para llevar la organización a su tierra, la verdad sea dicha, con resultados que no correspondían ni a su voluntad ni a sus esfuerzos.
Desarrolla, por tanto, Casimiro una labor de captación, promoción y puesta en marcha de la infraestructura socialista en Salamanca, de donde era también otro de los históricos fundadores del PSOE, el doctor Jaime Vera. El 20 de Agosto de 1881 funda en Ciudad Rodrigo, junto con un grupo de personas, la "Sociedad de Socorros Mutuos" . El objetivo fundamental de esta Sociedad era proporcionar ayudas económicas y sociales destinadas a socorrer a los individuos que la componían, fundamentalmente en los casos de enfermedad o inutilidad absoluta. Ofrecían unas prestaciones tales como el pago de baños en establecimientos oficiales, el abono de una cantidad determinada a los herederos de cada socio en caso de fallecimiento, etc, etc. Al año de su fundación ya contaba con doscientos treinta socios y un capital de 1.837 pesetas con 53 céntimos. Este tipo de Sociedad fue extendiéndose por el entorno, de tal forma, por ejemplo, que en Villavieja se fundó una de ellas en el año 1895 que agrupaba fundamentalmente a profesionales, pequeños comerciantes y empresarios, obreros, ... Pocos años después al formarse la Agrupación de Trabajadores se constituyó otra similar en la que estaban ecuadrados obreros y jornaleros fundamentalmente, aunque hay que hacer constar que algunos pertenecían a las dos sociedades, ya que en un primer momento cubrían cosas distintas (la segunda estaba más enfocada hacia los accidentes de trabajo y ayudas a la vejez).
Es Casimiro también un gran amigo de don Miguel de Unamuno, con quien se cartea frecuentemente, escribe artículos en la prensa provincial (El Adelanto, Noticiero Universal, ….), da conferencias y mítines, e incluso escribió la letra de una zarzuela titulada "Esposo, valiente y padre" que se estrenó en Ciudad Rodrigo y que fue duramente criticada por algunos medios conservadores que la catalogaron como "falta de moralidad". Participó también en unos juegos florales celebrados en Ciudad Rodrigo, obteniendo el segundo premio por un trabajo titulado "Industrias fáciles de desarrollar en Ciudad Rodrigo".
Pero vamos a ceñirnos más a sus actividades políticas. Comenzaron éstas fundamentalmente a partir de 1896, siendo el primer evento de importancia internacional al que asistió el mirobrigense el denominado IV Congreso de la Internacional Socialista que se celebró en Londres del 26 al 31 de julio de 1896.
Del escrutinio hecho por este comité, han resaltado elegidos para representar al partido en el Congreso internacional de Londres los correligionarios Pablo Iglesias, Jaime Vera y Casimiro Muñoz. El comité nacional ha encargado a la delegación de dicho partido al Congreso de Londres que se presente en Lille a saludar, en nombre de los socialistas españoles, al partido obrero francés, reunido en Congreso…
El Liberal, 26 de Julio de 1896
También asistió Antonio García Quejido en representación de la UGT. El congreso tuvo lugar como hemos dicho anteriormente en Londres, del 26 al 31 de julio. Había sido convocado como el Congreso Internacional Socialista de Trabajadores y Cámaras Sindicales Obreras. Fue aquí donde se produjo la ruptura con los anarquistas, aprobándose entre otras resoluciones, el informe sobre la socialización de la tierra y la jornada de ocho horas, efectuándose además un llamamiento a todos los trabajadores del mundo en contra del militarismo y el imperialismo
En Enero de 1898 se produce la fundación del Círculo Mercantil en Ciudad Rodrigo, en cuya Junta Directiva Casimiro Muñoz figuraría como Vicepresidente. Dos meses más tarde tendría lugar lo que algunos denominaron "motín de las mujeres" que se desarrolló en Ciudad Rodrigo y también en Lumbrales, a consecuencia de la exportación del trigo, de la escasez de este producto básico y de los precios que estaba alcanzando. Casimiro figuraría en una especie de Junta local encargada de supervisar todo lo relacionado con esta cuestión.
Una de las cosas emanadas de los congresos socialistas internacionales es precisamente la institucionalización del Primero de Mayo. El del año 1900 resultó especialmente interesante para nuestra provincia. En Salamanca capital se celebró un importante mitin con motivo de lo que ya se denominaba como Fiesta del Trabajo. Fue precisamente este mismo día cuando se colocó en la entrada de la Dehesa de Villavieja la piedra conmemorativa del Primero de Mayo. El mitin de Salamanca fue un acto muy importante para todos los socialistas y obreros salmantinos y a buen seguro que una representación de la agrupación de trabajadores de Villavieja estuvo presente en el mismo. Transcribimos a continuación el artículo que se publicaba "El Adelanto" el día siguiente, miércoles 2 de Mayo de 1900
A las diez de la mañana, el amplio Salón Artístico era insuficiente para contener a la multitud de obreros que lo llenaban, deseosos de asistir al meeting obrero anunciado para celebrar, con fecha del 1º de Mayo, la fiesta del trabajo. No bajaría el número de los allí reunidos, de 3.000 obreros, y a pesar de tanta concurrencia, el acto distinguióse por el orden que en él reinó, y que ha conquistado grandes simpatías en favor de los obreros, de parte de personas de todas clases y opiniones. Presidió el señor Villalba, y declarado abierto el acto, una banda de música ejecutó un himno apropiado á las circunstancias, que fué muy aplaudido. Don Fernando Felipe (Pepe Rey), usó de la palabra, y en su extenso discurso, que mereció generales elogios, abogó por la unión obrera, presentándola como la única manera de solucionar los actuales problemas en favor del proletariado. Los señores Fernández y Millán pronunciaron respectivamente breves y sentidas frases, enalteciendo la fiesta del trabajo, por su origen, su representación y las esperanzas que encierra; y el señor Barco, nuestro querido amigo y colaborador, con la elocuencia que le caracteriza, alentó a los obreros a perseverar en el camino emprendido, sin fiebres ni desmayos, a trabajar por su emancipación sin odios ni rencores, y a demostrar al mundo entero con su conducta, que son dignos del fin que persiguen, y que por su ilustración y sensatez constituyen la mejor esperanza para el día de mañana, y la más firme garantía para hoy. Estrepitosamente aplaudido al terminar su discurso, lo volvió a ser con entusiasmo mayor, al leer de una manera inimitable y que avaloraba sus grandes méritos y hermosos conceptos, El 1º de Mayo, valiente composición de Sinesio Delgado, y otra poesía, muy bien hecha, del señor Noreña. Este hizo uso de la palabra a continuación, y vehemente y espontáneo en la frase, sincero y enérgico en los conceptos, conmovido por su entusiasmo, del que hizo que participara su auditorio, pronunció uno de los mejores discursos que le hemos oído, y escuchó aplausos atronadores y justos.
Hizo el resumen de los discursos, nuestro queridísimo amigo don Casimiro Muñoz, tan conocido y estimado en Salamanca, y como nuestros elogios pudieran parecer dictados por el cariño, transcribimos a continuación el juicio que su hermosa oración merecíó a uno de nuestros colegas locales: «Habló, por último, el compañero Muñoz, y sería pálido cuanto dijéramos de su brillantísimo discurso. Explicó con frase correcta y magníficamente entonada, la significación y el origen de la fiesta del 1.° de Mayo, y concluyó dando a los trabajadores, con ese tono de "causerie" que tan bien sienta en los labios del señor Muñoz, sanos y honradísimos consejos, citándoles ejemplos prácticos y "sucedidos" que encerraban grandes enseñanzas. "El valor personal -decía el señor Muñoz- no consiste ya en la guapeza y en la brutalidad, consiste en la serenidad de juicio y en la bondad de sentimientos." "Seamos -añadía- seamos socialistas por egoismo y por amor. Despreciemos igualmente al explotador católico con vistas al carlismo o al integrismo, que al explotador ateo con vistas a la república." Inútil es decir que el simpático don Casimiro fué aplaudidísimo en diferentes ocasiones y al concluir su disenso.
El acto terminó con la distribución de premios, consistentes en herramientas de sus respectivos oficios, a los aprendices más aventajados de los gremíos asociados. Fué la nota más simpática del meeting, el ver a los obreros del porvenir, alentados y aplaudidos por los que actualmente les preparan el camino de la vida. Cuanto nosotros pudiéramos decir respecto al acto realizado por los obreros, parecería hiperbólico y distaría mucho de la hermosa realidad que ayer presenciamos los que asistimos al Artístico.
¡Loor a los proletarios salmantinos que ayer, al mismo tiempo que su propia estimación, se han captado el respeto de sus conciudadanos! Por ese camino, persiguiendo el progreso por medio del orden, llegarán donde se propongan, cuándo y cómo quieran. Por la tarde celebróse en el sit¡o denominado «La Serna», una modesta merienda, en la que tomaron parte gran número de obreros, y en la que de nuevo resaltó la nota de orden. El 1° de Mayo de 1900 constituirá con justicia, para los obreros salmantinos y para Salamanca entera,una fecha de grato recuerdo.
El mismo año 1900 se reunió en París el V Congreso de la Internacional Socialista. Sus sesiones se desarrollaron del 23 al 27 de septiembre. Asistieron en representación de la UGT y el PSOE , Pablo Iglesias, Facundo Perezagua, Antonio García Quejido y Casimiro Muñoz. En este congreso se debatieron diversos temas entre los que se contaban proseguir con la lucha por la consecución de la jornada de ocho horas y un salario mínimo, el mantenimiento de la manifestación y paro para el Primero de Mayo, la emancipación del trabajo (socializacion de los medios de produccion, organización en grupos políticos, sindicatos, cooperativas, cajas de socorro, potenciacion de la educación,...) y la participación en gobiernos burgueses como método transitorio y excepcional, siendo esta cuestión de las más debatidas y enconadas y que se seguirían arrastrando a sucesivos congresos.
Tras el Congreso de Paris, los representantes españoles en dicha convención, intervienen en un multitudinario "meeting socialista", en San Sebastián, el día 7 de Octubre de 1900, tal y como recoge "El Liberal" de Madrid en su edición del 8 de Octubre de dicho año
Se ha verificado en el Circo ecuestre el meeting socialista. Asistieron más de dos mil personas, viéndose en los palcos distinguidísimas damas, en cuyos semblantes se dibujaba la curiosidad mas viva. El compañero Casimiro Muñoz hizo una brillante exposición del programa socialista. Quejido trató de la acción económica de los trabajadores, recomendándoles la unión y la constitución de Sociedades de resistencia. En un hermosísimo discurso, que a cada período fué interrumpido por los entusiastas aplausos del público y muy especialmente de las damas el compañero Iglesias hablo de la asociación política de los proletarios ...
Quizás en esa estancia en San Sebastián y como consecuencia de las conclusiones del Congreso parisino recién terminado se gestase ya la idea de presentar a Casimiro Muñoz como candidato socialista por el distrito de San Sebastián en la provincia guipuzcoana en las elecciones a diputados que se celebrarían en el mes de mayo de 1901. Para conmemorar el Primero de Mayo de dicho año, y aprovecharlo además como acto preelectoral Casimiro Muñoz interviene en un mitin celebrado en la capital donostiarra.
… Siguió el compañero Casimiro Mufioz, candidato de los socialistas en las próximas elecciones de San Sebastián. Dijo que tal fe y convicción tiene en sus ideas que cree firmemente que si Jesucristo viniera otra vez al mundo, sería el más decidido apóstol del socialismo. Con fácil y elocuente palabra explicó el objeto de la fiesta del 1º de Mayo….Diez y nueve días más tarde, se celebran en toda España las elecciones a Diputados para las Cortes Generales. Tal y como hemos avanzado anteriormente, los socialistas guipuzcoanos elegieron como candidato al mirobrigense Casimiro Muñoz, que tuvo que enfrentarse a un acaudalado y joven empresario (dueño o casi dueño de Papelera Española, Banco de Vizcaya, Cooperativa Eléctrica Donostiarra, Saltos de Agua de Valcarlos, Compañía Minera Echevarría-Picavea, …) y que además era natural de Oyarzum. Se llamaba Rafael Picavea Leguía, y se presentó como católico independiente. Ante tal contendiente, poco se podía esperar en aquellos tiempos (el PSOE no llegaría a obtener su primer diputado en todo el territorio nacional hasta 1910).
"El Heraldo de Madrid".
Los socialistas no confían en el triunfo por esta capital de su candidato Casimiro Muñoz, pero presentándose a la lucha en estas elecciones, se proponen hacer un recuento de votos que les sirva de preparación para tomar parte en las próximas elecciones municipales
Heraldo de Madrid
No obstante Casimiro obtuvo unos resultados que fueron calificados en su día como muy favorables en comparación con lo que se esperaba. Casimiro se presentaba por el Distrito de San Sebastián que comprendía las localidades de Alza, Fuenterrabía, Irún, Lezo, Oyarzum, Rentería y San Sebastián. Los resultados fueron : Rafael Picavea y Leguia, 5220 votos (85,48%), Casimiro Muñoz Matilla: 887 votos (14,52 %); Otros: 4 votos. Vistos así los datos, el calificar esta elección de éxito socialista parece más bien una broma, pero si examinamos los resultados más pormenorizadamente se puede llegar efectivamente a considerar que fue un buen resultado. De los 887 votos obtenidos, en la ciudad de San Sebastián se consiguieron 827, el resto se distribuyó así : Alza, 6; Fuenterrabía, 0; Irún, 29; Lezo, 1; Oyarzum, 0; Pasajes, 17 y Rentería, 7. Es decir en la capital de la provincia Casimiro obtuvo un porcentaje bastante bueno, casi un 30% de los votos, que en algunas secciones llegó a ser de un 42%. Este dato era muy esperanzador para los socialistas de cara a unas próximas elecciones municipales. Por eso lo consideraron como todo un éxito. Que las elecciones en la capital donostiarra fueron reñidas lo prueban la existencia de varios altercados entre votantes socialistas y liberales:
En la plaza de la Escuela se originó un tumulto entre electores de uno y otro bando, resultando herido de un garrotazo un agente electoral de los liberales.
El Heraldo de Madrid
Tras su fallido intento de ser elegido diputado por San Sebastián, Casimiro regresa a nuestra tierra. Su presencia en Ciudad Rodrigo fue aprovechada por los dirigentes de la nueva Agrupación de Trabajadores villaviejense -con apenas un añito de edad- que le solicitaron impartiese una conferencia a los afiliados socialistas de Villavieja. La charla se programó para el 29 de Junio, festividad de San Pedro, y era posiblemente el acto central destinado a cerrar la Junta General de la mencionada Agrupación.
Dos años más tarde, Casimiro volvería a ser candidato. En este caso en Salamanca capital. Corría el mes de marzo de 1903 y se aproximaban nuevas elecciones generales. Desde el partido y el sindicato socialista se proyectan a nivel nacional una serie de actividades cuya misión principal es impulsar la campaña de las próximas elecciones. Mientras Antonio García Quejido, como representante de UGT, realizaba una gira por la mitad norte de España -entre otras provincias, visitó Salamanca- Pablo Iglesias y Casimiro Muñoz tenían pensado realizar un recorrido por el Sur:
La excursión de propaganda socialista que tenían proyectada Pablo Iglesias y Casimiro Muñoz por Andalucía y para la cual se habían recaudado por suscripción voluntaria más da 2.000 pesetas en cuotas casi todas inferiores a 25 céntimos, ha sido aplazada por la proximidad de las elecciones y por motivos de índole privada.
"El Globo" Diario liberal independiente. 13 de Marzo de 1903
Suspendida la gira por el Sur, Casimiro se acerca a la provincia charra. Los socialistas salmantinos han programado para el 18 de marzo unos actos para conmemorar el establecimiento de la denominada Comuna de Paris. (18 de marzo de 1903). Los oradores punteros del acto serían Remigio Cabello de la Agrupación de Trabajadores de Valladolid y Casimiro Muñoz de Ciudad Rodrigo. La Comuna de París fue un breve movimiento revolucionario que gobernó la ciudad de París del 18 de marzo al 28 de mayo de 1871, instaurando un proyecto político popular autogestionario que para algunos autores se asemejó al comunismo.
.... Al ocupar la tribuna el compañero Casimiro Muñoz, de Ciudad-Rodrigo, escucha una ovación de simpatía. Sobradamente conocidas son las relevantes dotes oratorias de este infatigable propagandista del socialismo, para que nosotros las hagamos hoy resaltar. Su palabra fácil, su discurso elocuente, sus enseñanzas, sus consejos, fueron escuchados con religioso silencio, interrumpidos solamente por los aplausos y las pruebas del entusiasmo con que eran acogidos por el público. Recomienda la unión de los obreros para elevar al Municipio, á la provincia y á las Cortes; representantes suyos, pues siendo en estos sitios donde las leyes se elaboran, necesitan que alguien vele por los intereses y por los derechos de los débiles. Se lamenta de que los obreros que trabajan años y años, que construyen edificios suntuosos y fabrican objetos que los ricos emplean para satisfacer sus lujos, mueran en el arroyo y en la miseria, sin casa donde cobijarse, sin alimento para satisfacer su apetito, sin ropas para cubrir sus desnudeces, sin medios, en fin, para librarse de perecer de hambre y de frío, cuando sus músculos se resisten al trabajo, y la vejez les obliga á descansar en su labor. En estilo jocoso, fustiga duramente á esas compañías que monopolizan tabacos, fósforos y explosivos, sin fijarse en que causan la ruina de miles de famillas que vivían antes al amparo de la fabricación y venta de esos artículos. Dice que no defiende al obrero holgazán y díscolo, sino á los trabajadores en general, como creadores de toda riqueza. Aconseja á los obreros que eviten los motivos que puedan dar lugar al empleo del maüsser, porque la paz será el medio más eficiente y seguro para conseguir su redención. Califica de odioso el impuesto de consumos, impuesto que los monárquicos no saben con qué sustituir; pero que los socialistas cambiarían por una contribución progresiva sobre esas propiedades que tanto valor han alcanzado con la construcción de los ferrocarriles. Nosotros, dice, no queremos despojar la propiedad, queremos transformarla. Revolución indica rompimiento de una legalidad arrancada por el movimiento biológico de la historia, mientras la evolución es el lento cambio de la legalidad social. Censura á los que hablan constantemente mal del clero, y no crean organismos que sustituyan su poder, en favor del niño abandonado y del anciano inútil para el trabajo. Con abstracciones filosóficas, exclamaba, no se cuida de los desheredados, y de los que padecen toda clase de miserias. Fustiga el servicio militar, que califica de contribución del pobre, y lo mismo hace con la usura, tan extendida en nuestros campos. Compara el movimiento de la Commune a los inventos iniciales que, aunque imperfectos, son el primor jalón para llegar al logro de un desenvolvimiento social progresivo. Ocúpase de las ocultaciones de la riqueza, y trata con justificada dureza al señor Maura, por haber puesto la guardia civil á disposición de una empresa poderosa, cuando la huelga de los empleados de ferrocarril en Vigo. Aconseja á los socialistas que apoyen en las elecciones á los candidatos radicales, cuando no los haya del partido á que pertenecen. Cree que el periodo evolutivo terminará en una huelga general; pero que hacer ésta locamente y sin preparación es un aborto perjudicial. Terminó su elocuente discurso con el siguiente período que transcribimos íntegro: "¡Compañerosl Dediquemos un recuerdo á cuantos han sufrido por el progreso. La sangre no ha sido estéril. La derramada por los 85.000 communalistas fusilados, fué el mejor riego que pudo darse á la idea socialista. Con ella, y con los detritus que arroja la descompuesta burguesía, se ha formado un rico abono que produjo una cosecha de 140 diputados socialistas en el parlamento francés; para poder gritar: ¡Viva la revolución social! ¡Viva la Commune!". Entusiastas y prolongados aplausos premiaron la admirable disertación de Casimiro Muñoz
"El Adelanto", 22 de marzo de 1903
En línea con lo expuesto en su alocución anterior, los socialistas salmantinos, contra todo pronóstico y por vez primera, presentan un candidato a las elecciones a diputados a Cortes por el distrito de Salamanca. Y eligen para ello a Casimiro Muñoz. A pesar de la existencia en la ciudad de un número considerable de trabajadores y obreros afiliados al sindicato y al partido socialista, no solían éstos presentar candidaturas electorales, siendo costumbre la de apoyar, por lo menos en teoría, a los candidatos radicales que eran los más cercanos ideológicamente hablando, aunque, es muy probable que muchos de ellos se acogiesen, aún en contra de sus convicciones, a la tan extendida y arraigada compra de votos, que para una familia obrera podía representar unos buenos ingresos extras que no eran cosa de desperdiciar. Esta "perversión" del sufragio era la causa principal de la hasta entonces "apatía electoral socialista".
Así pues, por Salamanca se presentan tres candidatos. Juan Antonio Sánchez del Campo (integrista, es decir de tendencias conservadoras), Luis García Romo (republicano) y Casimiro Muñoz Matilla (socialista). Así lo contaba "El Castellano" en su edición del 16 de Abril de 1903, diez días antes de los comicios
Son tres los candidatos, y cualquiera que en estos días tenga la paciencia de escuchar lo que dicen los amigos de unos o de otros, si no pierde la cabeza, puede contar que la tiene segura sobre los hombros por los siglos de los siglos. Oye usted hablar a los de Sánchez del Campo y para ellos es incuestionable que este señor se coloca en primera fila, y no por el voto de veinte ni treinta aficionados, sino por el de una inmensa mayoría del público que aquel día acuda a la corrida electoral. Escucha uno a los de García Romo, y la misma canción. Y si se tropieza con un socialista, dicen que ellos no van a la lucha por que Casimiro. Muñoz triunfe, toda vez que el sufragio está pervertido, pues si así no fuera, el suyo sería el que representara a Salamanca en las cortes.Y es que efectivamente el soborno era "el pan nuestro de cada día". Vean, lo que cuenta "El Adelanto" el día 27 de Abril, acerca del desarrollo de la jornada electoral en la sección instalada en las escuelas de la cuesta de Sancti Spiritus:
El apernamiento se ha efectuado, en esta sección, de manera encarnizada. Ha habido vales en abundancia, limosnas a granel y votos comprados con descaro inaudito. El tipo de cotización ha sido de 15 pesetas. Muchos de los que las cogían, votaban luego á quien mejor les parecía..."Apernamiento" ¡Esa era la palabreja mágica! La que se utilizaba para designar el acto de "comprar el voto" a cambio de dinero en metálico o de un vale canjeable por dinero. En el párrafo anterior se dice que "votaban luego a quien les parecía", pero la cosa no era tan sencilla, ni los "sobornadores" eran tan tontos. Veamos lo que ocurrió en otras secciones:
A primera hora de la mañana instalóse en una casa de la calle del Clavel, bien provisto de dinero, un conocido industrial, exrepublicano, que descaradamente daba guita a favor del candidato señor Sánchez del Campo. Denunciado el hecho al señor Gobernador, el centro electoral trasladóse a otro sitio, sin que los sobornadores fueran molestados.
Y otra mas:
En las primeras horas fué sorprendido Ramón Martín por don Valentín Cáceres, en el momento de dar tres duros por el voto a Nicasio Prieto, por lo cual fueron los dos conducidos al Gobierno, donde el Nicasio confesó que se los daba porque votase al señor Sánchez del Campo, lo que dió lugar a que quedase detenido.
La compra de votos se ha hecho descaradamente. Los apernadores escoltan a los apernados, hasta la puerta del colegio, y allí esperan para luego conducirles a las ofícinas donde se paga la mercancía comprada.
En esta sección, seguramente, es donde ha habido más movimiento y donde ha corrido más el metal. Los apernadores del candidato católico, se han aprovechado de la miseria de las gentes de los Milagros y del barrio de San Vicente, y han comprado buen número de votos. El ajuste de éstos hacíase como si se tratase de una piara de ovejas o de un buey de labranza. El tipo mínimo de cotización eran 15 pesetas. Han abundado los vales. Los electores comprados llévanles los apernadores, entre ellos, como si se tratase de facinerosos.
A un viejo decrépito y muy enfermo, lleváronle en una silla a votar. Dicennos que le dan 15 pesetas. ¡Pobre hombre! Por el aspecto que presentaba, es muy posible que le sirvan para responsos. E l espectáculo indigna
¡Para que seguir! Ante este mercadeo de votos poco podían hacer los socialistas. Y si a eso añadimos lo que ahora denominamos "voto útil"... ¡pues, menos! Todos los indicios apuntaban a un triunfo del candidato republicano en la capital mientras que en los pueblos circundantes el ganador sería el señor Sánchez del Campo. En número de votos totales, parece ser que el triunfo se decantaba por este último. Pero había que esperar al escrutinio general que se celebraría el jueves 30 de Abril. En una sesión muy controvertida se anularon los votos de un montón de secciones de pueblos por lo que el escrutinio final logró dar la vuelta a lo que en principio se sabía. Este fue el resultado final:
- Luis García Romo, 3366
- Juan Sánchez del Campo, 3021
- Casimiro Muñoz, 29
- Papeletas en blanco, 5
Como se observa los votos conseguidos por Casimiro no reflejan, ni mucho menos, la cifra real de posibles electores socialistas, que por una u otra causa, recurrieron al voto útil. De hecho tras la proclamación de diputado de García Romo por la Junta Electoral se produjo una manifestación espontánea de júbilo y alegría entre los votantes republicanos:
La noticia de la proclamación de diputado a Cortes de don Luis García Romo, circuló rápidamente y produjo un entusiasmo indescriptible. Gran número de obreros dejaron el trabajo, y a las cuatro de la tarde era punto menos que imposible dar un paso por la Lonja de la Cárcel. Los vivas al señor García Romo, que fué sacado en hombros de la Casa Consistorial, a la libertad y a la república, escuchábanse frecuentemente. Tiráronse muchos cohetes y bombas; los balcones hallábanse llenos de gente, y por todas partes dábase pruebas de la alegría y del regocijo popular.A las siete de la tarde, próximamente, reuniéronse en la plazuela del Liceo unas dos mil personas. Al poco rato, apareció una música que tocando la Marsellesa y el Himno de Riego emprendió la marcha por la calle del Dr. Riesco, a la de San Pablo donde vive el diputado electo por Salamanca señor García Romo. A la multitud que se reunió primeramente en la plaza del Liceo, mezclóse la que se hallaba en la Lonja, formándose una imponente manifestación que se dirigió al barrio de los Milagros.
… intentó el señor Gobernador civil disolver la manifestación; pero los ruegos de la autoridad civil fueron vencidos por el entusiasmo do las gentes, y estas siguieron hasta el Arrabal del Puente….
El Adelanto, 1 de Mayo de 1903
Aunque nos salgamos un poco del tema, digamos que la cosa no quedó así. Luis García Romo, presentó su credencial como diputado el día 19 de Mayo, pero… aun no se había constituido oficialmente el Congreso cuando la Comisión de Actas proclamó electo, el día 9 de Junio, a su contrincante conservador Juan Antonio Sánchez del Campo.¡Todo el gozo en un pozo!
En vísperas de estas elecciones, se publicó en "El Centinela" de Ciudad Rodrigo un pequeño artículo firmado por Casimiro Muñoz, donde éste explicaba cómo deberían ser y celebrarse las elecciones. Lo tituló "Criterios electorales" y entre ellos figuraban ya las que hoy en día para algunos son muy buenas y para otros son muy malas. Me refiero a lo que llamamos "elecciones primarias" y que Casimiro Muñoz denominaba "antevotación":
Toda vez que "El Centinela" desea conocer el juicio de los electores acerca de la forma y modo con que se debieran hacer las elecciones, allá vá el mio, que consiste sencillamente en que cada agrupación política o núcleo de vecinos debía designar los candidatos en una antevotación verdad, hecha con la mayor independencia, como hace el partido socialista; y como muy bien pudiera y aún debiera realizar el comité canalejista de aquí, indicando el individuo del partido que le pareciese conveniente; mucho más contando esta colectividad con tantos hombres de talento y prestigio en la provincia y fuera de ella. Una vez nombrado el candidato, invítenle a presentarse al cuerpo electoral para que éste oiga de sus labios cuanto crea conveniente poner en conocimiento de los electores, como garantía de su capacidad y buena fé, siguiendo el antiguo adagio de que á tanto te obligues como luego te harán cumplir. Repártanse candidaturas y manifiestos en que aparezca con claridad el programa del partido y deberes del candidato, costeando el comité todos estos gastos para conservar siempre su autonomía. ¿Que después de estas molestias y sacrificios obtienen pocos votos? Paciencia. Otra vez tendrán mas. Pero aunque no triunfen lucharán dentro del verdadero espíritu democrático dando buen ejemplo y educando a la vez al cuerpo electoral, para que no acabe de malearle el corruptor dinero que, por lo visto, aspira a convertir este distrito en feudatario de sus talegas, lo que fácilmente conseguirá si le dejan libre él campo todos los partidos y cuantos hombres tienen independencia y dignidad.
Casimiro Muñoz.
No se habían apagado aún los ecos de las elecciones cuando el compañero Casimiro se traslada a Béjar, donde se celebrará la Fiesta del trabajo de ese año, 1903. Imparte allí una conferencia encuadrada en los actos programados por la agrupación de trabajadores de la ciudad textil.
Béjar, 1 de Mayo de 1903, 10:45 de la mañana
Acompañada de dos bandas de música, con banderas y estandartes, se ha celebrado una imponente manifestación obrera, que ha recorrido todas las calles de la población. Se cerraron los establecimientos comerciales y las fábricas. Reinó el mayor orden. A las tres de la tarde se verificará una gira campestre, dándose un baile en la Plaza de Toros y destinándose a un fin benéfico el producto del mismo. Celebrando esta forma de la fiesta del trabajo, dará luego una conferencia el compañero Casimiro Muñoz.
"La Correspondencia de España", Madrid
Agosto de 1904. Casimiro Muñoz se prepara para participar al VI Congreso de la Internacional Socialista que se celebra en Amsterdam del 14 al 20 de dicho mes, organizado por el BSI (Buró Socialista Internacional) organismo creado en el anterior Congreso de Paris. Asisten por parte española cinco delegados: Pablo Iglesias, Vicente Barrio, Casimiro Muñoz, Antonio Fabra Ribas y Mariano García Cortés. Aparte de la eterna cuestión acerca del "revisionismo" -que trataba de cambiar, para conseguir el poder político, la táctica basada en la lucha de clases y sustituirla por concesiones al orden establecido-, se tratan también en dicho congreso otros temas: el de la huelga general que se considera inpracticable, la oposición a cualquier guerra colonial, el sufragio femenino, el establecimiento de seguros de paro, enfermedad, accidentes, vejez,… pagados com impuestos sobre los grandes ingresos y la herencia, etc., etc.
10 de Septiembre de 1905. Casimiro Muñoz es nuevamente el candidato socialista por el distrito de la capital de la provincia de Salamanca. Las expectativas son practicamente nulas, teniendo en cuenta que el contrincante con mas probabilidades de ser elegido es el liberal -y por tanto relativamente cercano a las ideas socialistas- Isidro Perez Oliva. Efectivamente así sucede, consiguiendo Casimiro Muñoz solamente 44 votos. Lo de Salamanca capital resulta un poco chocante si tenemos en cuenta que a los mítines obreros y fiestas del trabajo acuden varios cientos -a veces dos o tres mil- trabajadores que luego a la hora de votar desaparecen del mapa.
Primero de Mayo de 1906. Casimiro Muñoz participa en el mitin -un tanto descafeinado según algunos medios-con el que parte de los trabajadores mirobrigenses realizan en la "Fiesta del Trabajo". Entre los varios oradores, Casimiro Muñoz
... explicó el origen del socialismo, la diferencia del mismo y los diferentes estados, y sus consecuencias, combatiendo los aranceles que a su juicio, perjudican a la mayoría de los españoles, encareciendo el mercado por los gravámenes con que están cargados los artículos de primera necesidad, indicando los precios de determinados artículos, que indica el arancel, estando largo rato explicando diferentes cuestiones sociales, que fueron escuchadas con atención por el público, siendo felicitado.
El Adelanto, 3 de Mayo de 1906
En el verano de 1907 se celebra el VII Congreso de la Internacional Socialista en Stuttgart. Tuvo lugar del 18 al 24 de agosto de 1907. Fueron corregidas en este Congreso las distintas desviaciones de algunos partidos socialistas hacia el "oportunismo". Volvió a discutirse la cuestión nacional y colonial. Fue debatido también el problema de la relación entre partido y sindicato, pronunciándose en el sentido de la aproximación del segundo al primero. Se trató también el tema de la inmigración y el derecho de las mujeres al sufragio universal, girando otro de los principales debates en torno a la guerra y al militarismo. Asistieron a este congreso en representación del PSOE y la UGT, Pablo Iglesias, Emilio Corrales, Casimiro Muñoz , Antonio Fabra Ribas, Mariano García Cortés y Rafel Ormaechea. Tras el regreso de la delegación española, se celebró el 28 de Agosto un mitin en Madrid:
A los ocho y media se celebró el meeting anunciado. Fueron oradores Casimiro Muñoz, García Cortés y Pablo Iglesias. Los tres pusieron de relieve la importancia del Congreso de Sttugart y dieron cuenta de los acuerdos tomados, entre los que el principal es el de que las masas trabajadoras se opongan a las guerras entre los pueblos, anunciando que pronto se realizarán en toda España actos encaminados a evitar la intervención en Marruecos, ajustando las procedimientos al valor y elementos con que para ello cuenta el socialismo español. Los oradores fueron muy aplaudidos y el orden completo.
"El Imparcial", jueves, 29 de agosto de 1907.
Verano de 1910. Casimiro Muñoz asiste por quinta y última vez a un congreso de la Internacional Socialista. Es el VIII Congreso de la Segunda internacional que se celebra Copenhague (Dinamarca). Tuvo lugar del 28 de agosto al 3 septiembre de 1910. Se discutió en él acerca de la relación entre el partido y las cooperativas, acordándose también pedir a las autoridades que se constituyese un sistema general de seguro obligatorio, cuya administración debía confiarse a las organizaciones obreras, y cuyos gastos deberían ser pagados por los propietarios de los medios de producción. Se continuaba solicitando la jornada de 8 horas así como la prohibición del trabajo de los niños menores de catorce años y la abolición del pago de salarios en especie. Se volvió a discutir nuevamente el problema de la guerra, así como aprobar la petición de abolición de la pena de muerte. Estuvieron representados treinta y tres paises, estando constituida la delegación socialista española por Pablo Iglesias, Emilio Corrales, Casimiro Muñoz y Francisco Azorín por el PSOE y Vicente Barrio por la UGT.
En Febrero de 1913 sabemos por noticias de la prensa local mirobrigense que se encuentra enfermo. Y a lo que parece desde entonces su estado de salud va empeorando progresivamente a pesar de que a lo largo del mes de Mayo de 1915, algún semanario local (Avante) informaba de que "se encuentra bastante mejorado de la recaida que en dolencia sufrió, días pasados, don Casimiro Muñoz Matilla" . Días más tarde incide en "que esta más aliviado de su mal". El desenlace fatal se produjo el último día del mes de Septiembre de dicho año:
En su morada de Ciudad Rodrigo, donde vivió dedicado al comercio, ha muerto Casimiro Muñoz, socialista significado. Casimiro Muñoz dedicó los mejores años de su vida á la propaganda societaria. Afiliado hasta su muerte al partido socialista, fué su representante con las primeras figuras del socialista español, en muchos congresos socialistas que se celebraron en Copenhague, Stutgart, Londres, Amsterdam, etc., tomando parte activa en los debates y presentando proposiciones que merecieron la general aprobación. Sus achaques y su edad le retiraron de la vida política activa, y aun cuando ya que con la presencia y la palabra no podía seguir la propaganda, su pluma siguió llenando cuartillas que veían la luz en las revistas socialistas. Reciba su viuda doña Francisca Fuentes, hermano y demás familia, el más sentido pésame.
El Adelanto, 4 de octubre de 1915
Terminamos esta entrada con otro párrafo de Juan José Maroto tomado del artículo citado al comienzo y publicado en el diario "La Libertad" el 30 de Septiembre de 1930
Hombre óptimo, tenía amistad con todos -su librería era una especie de tertulia afectuosa- , y don Migual de Unamuno contó alguna vez que Casimiro Muñoz y aquel obispo de Ciudad Rodrigo tan bueno, tan santo, que Clarín retrató en La Regenta como obispo de "Vetusta", eran amigos entrañables…. Que en 1868 pudo brillar y figurar; pero que -como haria toda su vida- se retiró, se obscureció, después de hacer el bien por deber ...